Cuando se busca un hijo, las mujeres estamos dispuestas a probar casi todas las recomendaciones para concebir. Hoy explicamos cuales son las posturas sexuales que pueden ayudar a conseguir ese embarazo tan deseado.

La posición de plegaria –o lo que es lo mismo, el hombre detrás o encima de la mujer- permite una penetración más profunda en la vagina, lo que hace que el semen se encuentre más próximo al cuello del útero.

La postura lateral, con el hombre detrás, también permite una penetración más profunda y más cercana al contacto con el cérvix uterino, por lo que el semen, al igual que en la postura anteriormente mencionada, se encuentra más cercano al útero.

Elevar la pelvis de la mujer después de las relaciones sexuales también permite que los espermatozoides penetren con mayor profundidad en el cuello uterino. Se puede llevar a cabo colocando una almohada bajo la pelvis, con el fin de que la gravedad haga más efecto.

También después del acto sexual, es muy conveniente que la mujer permanezca recostada durante al menos media hora, para que el semen que se encuadra en su interior pueda llevar a cabo el recorrido oportuno hasta el óvulo a fecundar.

Llegar al orgasmo femenino, además de resultar muy placentero, es también fundamental para incrementar las oportunidades de embarazo. Esto se debe a que cuando la mujer lo experimenta realiza fuertes contracciones con la vagina y el útero que permiten un mayor acercamiento de los espermatozoides a las trompas de Falopio, donde se producirá la fecundación definitiva.

Todos estos consejos no son sinónimo de éxito para concebir, pero nunca está de más probarlos para incrementar las posibilidades de concepción.