CALIDAD
- La ropa del bebé debe ser holgada, cómoda y fácil de poner.
- Para las sábanas y toda la ropa que está en contacto directo con su piel, las fibras naturales, como el algodón y el hilo, son preferibles a las sintéticas.
SEGURIDAD
- Se debe evitar la angorina y cualquier tejido que suelte pelo que pudiera ser inhalado por el bebé, así como los cordones o lazos.
- Si una prenda lleva botones, han de ir por detrás, ser grandes y estar bien cosidos, para evitar que accidentalmente pudieran obstruir sus vías respiratorias.
- Los imperdibles son muy peligrosos y no deben usarse.
LAVADO
- No se deben utilizar lejías ni detergentes fuertes, sino jabones especiales para ropa delicada.
- Durante los primeros meses, es mejor lavar su ropa por separado.
- Es importante hacer un doble aclarado para que no queden restos de jabones ni suavizantes.
- Antes de estrenar ropa de cama o cualquier prenda del bebé, conviene eliminar el apresto que pueda traer de fábrica, lavándola y aclarándola a fondo.