Es la canción del verano, sí, y seguro que estás hasta el gorro de escucharla. Pero no podíamos resistirnos a titular así este recordatorio del cuidado de los pies. Porque lo cierto es que solo en esta época del año nos acordamos de ellos. Y es buen momento no solo para hacer pedicuras y esmaltados de moda, también para visitar al podólogo y repasar los problemas que nos persiguen todo el año pero que seguramente ahora tendremos más tiempo para preocuparnos por ellos y solucionarlos.

Tratamiento definitivo de la uña encarnada

Causas: Básicamente genética, la uña nace con forma de teja y se clava en los laterales por traumatismo, golpes, calzado estrecho demasiado apretado, un corte mal hecho o excesivo, la presión del calcetín o el calzado sobre el pulpejo que provoca que este se monte y la uña se clave, exostosis subungueal, un pico de la falange que sobresale, la uña se curva y los laterales se clavan.

Desde Clínica Menorca la recomendación para solucionar este problema es la Cirugía. El Dr. Luis Durán, cirujano podólogo explica que “es una intervención sencilla que se hace con anestesia local en la base del primer dedo y consiste en hacer una extirpación de los laterales de la uña, como un octavo normalmente a cada lado, aunque en algunos casos solo es necesario en uno de los laterales. Luego se practica un legrado en la matriz ungueal y se quema con ácido fénico, para que no quede ninguna célula matrizal. La cura se realiza con alcohol, drenaje y pomada antibiótica durante 5-7 días. Después de este período se hará una revisión”.

Duración de la intervención: 20 min.

Postoperatorio: ninguno, el paciente sale por su propio pie y puede hacer vida completamente normal, se recomienda calzado amplio. Es totalmente indolora, en algunos casos de sensibilidad extrema se recomienda paracetamol.

Precio: 400 aprox.

Problemas musculares

  • Fascitis plantar, que consiste en la rotura e inflamación de fibras de la fascia plantar.
  • Bursitis que es la ‘bomba’ que hidrata las articulaciones
  • Tendinitis, inflamación de tendones
  • Esguinces, distensión o rotura parcial de ligamentos

Todos estos problemas se deben a una pisada incorrecta o a movimientos forzados produciendo tensión. Hacer ejercicios para mantener fuerte el tobillo y entrenar la musculatura antes y después de cualquier deporte que vayamos a realizar, así como practicar estiramientos a diario, nos ayudará a evitar estos problemas, aunque desde Clínica Menorca la recomendación es que, además, acudas a un profesional especializado en deportes (médico deportivo, fisioterapeuta o podólogo) para que realice un estudio biomecánico completo.

En Clínica Menorca, la Dra. Cristina Lurguíe, podóloga experta en Biomecánica, realiza en consulta las siguientes valoraciones:

  • estudio osteomuscular en camilla para detectar posibles limitaciones en las articulaciones de cadera, rodilla, tobillo y pie;
  • valora la fuerza muscular o, por el contrario, si existe distonía muscular;
  • exploración en bipedestación para ver si existen posibles dismetrías, (diferencia de altura entre un lado y el otro causada por un fémur o tibia más cortos, o por problemas en la espalda, como la escoliosis).

Después, en la Plataforma de presiones para el estudio biomecánico de la pisada detecta los puntos de presión del pie primero en estática y después en dinámica, al caminar. Todos los datos son analizados en un programa informático e interpretados por el podólogo que graba la marcha, para después analizarla en detalle. En general, el estudio biomecánico de la pisada consta de muchas pruebas que nos darán la pista de cómo mejorar la postura, ajustar las caderas para una colocación de piernas más armoniosa, etc. Si fuera necesario se recomienda la colocación de unas plantillas ajustadas a cada paciente milimétricamente. En realidad, tiene muchos beneficios para la salud, porque en un futuro evitará lesiones no solo de los pies, también de columna, rodillas, cartílagos, fascistis, etc.

Otras lesiones frecuentes

  • Síndrome de uña negra o hematoma bajo la uña. Se produce por microtraumatismos de repetición. Esto es muy frecuente en corredores habituales, el uso de aletas en los pies en buceadores o aficionados al snorkel en esta época del año, y también en personas que de habitual ‘pisan mal’.
  • Onicomicosis u hongos en las uñas. Aparece por microtraumatismos repetidos o por contagio. Una buena higiene y usar en sitios públicos zapatillas de goma puede ayudarnos a controlar el contagio.
  • Pie de atleta. Son hongos dermatofitos que se desarrollan por exceso de sudor y maceración o por contagio en zonas comunes como piscinas.
  • Ampollas. Por exceso de sudor y roce. Hidratación para prevenirlas, apósitos cuando aparecen y desinfección si se explotan es la única solución.

Consejos para el cuidado de los pies en verano, por la Dra. Lurguíe, podóloga de Clínica Menorca

  1. Hidratar los pies a diario utilizando una crema específica con urea. Aplicar en todo el pie excepto entre los dedos ya que favorece la aparición de hongos, pero sí en las uñas.
  2. Hacer hincapié si vamos a cambiar de calzado, de sandalia a zapatilla o viceversa. En este caso aplicar crema lubricante específica para evitar rozaduras.
  3. Si vamos a tomar el sol poner una buena capa de protector solar, especialmente en la zona del empeine, muy sensible a la radiación solar por encontrarse sobreexpuesta.
  4. Si vas a hacer senderismo durante horas (tipo Camino de Santiago por ejemplo) aplica vaselina para evitar ampollas y usa un calcetín a ser posible sin costuras.
  5. Corta las uñas en recto. Nunca redondo, para evitar que se claven.
  6. Controlar la hiperhidrosis (sudoración excesiva). Utilizar productos en espray o en crema mejor que en polvo, para evitar hongos y uñas encarnadas.
  7. Usa el calzado adecuado para cada situación. Hay que tener en cuenta el terreno, si vas a correr, bailar o pasear. Mucho cuidado con la moda de ‘pronador/supinador’, no siempre se ajustan a las necesidades individuales, a no ser que un podólogo lo especifique.
  8. Si te vas a decantar por la estética a la hora de calzarte, que sea solo para momentos puntuales. El calzado habitual ha de ajustarse a las necesidades del pie.
  9. Compra el calzado a última hora de la tarde ya que el pie está algo más hinchado, así evitaremos el exceso de presión en determinadas zonas del pie.
  10. Al menos dos veces al año, según necesidad, acude a un podólogo para eliminar callos, durezas, corte de uñas y realizar un diagnóstico y tratamiento de posibles patologías.