Vivimos una época muy acelerada, en la que el ritmo laboral, los compromisos sociales y familiares, las responsabilidades y la exigencia de mejorar continuamente nuestra formación, conocimientos y salud personal, nos roban demasiado tiempo, y nos olvidamos de cuidar otros aspectos de nuestra vida privada que damos por hecho deben funcionar sin apenas atenciones, nos referimos por supuesto a las relaciones de pareja.

El estrés, las preocupaciones y el agotamiento causado por tanta actividad diaria nos impiden, en la mayoría de las ocasiones, aportar dedicación, tiempo e imaginación a nuestra vida sexual. Debemos concienciarnos de la importancia de aportar erotismo y sensualidad en las relaciones íntimas con nuestra pareja, ya que es un aspecto fundamental en la estabilidad de nuestra salud física y mental. Debemos dejar a un lado tabús y prejuicios, y liberar al máximo nuestra lívido, para conseguir un ambiente que potencie al máximo el deseo erótico y sexual en nuestras relaciones de pareja.

A veces la imaginación y el deseo no son suficientes para alcanzar nuestros objetivos, por lo que un poco de ayuda nunca viene mal. Queremos darte algunos consejos que te ayudarán a crear el entorno apropiado, para que tú y tu pareja liberéis el erotismo y la sensualidad que os permitirán mejorar vuestras relaciones íntimas.

Tómate tu tiempo, cena, vino y…

Prepara una cena romántica, sin prisa, tienes toda la noche por delante. Una luz tenue y con velas ayudará a crear un ambiente apropiado. Pon música de fondo, que te permita charlar sin tener que elevar la voz y sea muy relajante. Te recomendamos que prepares algo ligero y para compartir, unas verduritas con alguna salsa ligera que te permitan usar las manos para dar a probar a tu pareja, unos canapés de salmón y queso fresco, que sea muy frugal y regado con un buen vino que ayude a liberar tensiones y relajar tu estado anímico. Fundamental un buen postre, también para compartir, fondue de chocolate y frutas puede ser una buena elección. Temas prohibidos de conversación: trabajo, familia, hijos, política y religión; planifica algún viaje, aunque sea imaginario, eso te dará un buen tema de conversación. Saca a tu pareja a bailar, el contacto, el ambiente y el vino os irán envolviendo y… tómate tu tiempo y déjate llevar.

Necesitas relajarte, un buen masaje erótico te ayudará a conseguirlo

Prepáralo todo con tiempo, no tengas ninguna prisa, la lentitud y la calma son los mejores aliados del erotismo y la sensualidad. Crea un ambiente adecuado con velas, música clásica de fondo, aromas frutales y una temperatura agradable. Utiliza aceites aromáticos y geles eróticos, si no sabes dónde conseguirlos, te recomendamos esta web: Mundoerotico.es. Puedes empezar por los pies, es una zona que suele estar muy sobrecargada, y un masaje suave de pies puede ser muy estimulante para liberar sentidos y sensaciones. Puedes continuar de forma muy pausada por piernas, caderas, cintura, espalda, hombros y cuello. Una vez los sentidos estén estimulados al máximo, puedes pedirle a tu pareja que se dé la vuelta y el resto “lo dejo en tus manos”.

Juguetes eróticos, películas y conversaciones “subidas de tono”

No tengas miedo a probar nuevas sensaciones y olvídate de tus prejuicios, estás a solas con tu pareja, y si los dos estáis de acuerdo, todo vale. Existen infinidad de juegos eróticos que podéis compartir (en la web que te he mencionado antes los puedes encontrar), podéis ver una película erótica juntos, o simplemente puedes vendarle los ojos a tu chic@ y leerle un relato erótico, no hay nada más sensual que sentir la excitación de tu pareja. Pídele que actúe con total libertad y no reprima sus sensaciones, participa de la experiencia y déjate llevar

No os olvidéis que las mejores herramientas para cuidar las relaciones íntimas de pareja son, la calma, la imaginación, la relajación, el erotismo y la sensualidad, y que los límites os lo debéis poner vosotros mismos, sin tabús, reproches o miedo a experimentar. Y si necesitáis “navegar” por nuevas sensaciones, visitad la web que os mencionado antes, me lo agradeceréis.