En mujerglobal.com nos gusta todo lo relacionado con la mujer, y por eso os recomendamos esta novela.

«Sábados de súper acción» pertenece al género denominado «Chick lit», tan de moda actualmente, y cuya máxima representación (por conocida y alcance) es «Sexo en Nueva York (Sex in the City)». Estamos ante un género literario dirigido a las mujeres jóvenes, que trata de mostrar la extensa gama de experiencias por las que atraviesa la mujer actual en su vida cotidiana, haciendo hincapié en las relaciones de pareja, el amor y el sexo.

Pero quien mejor os puede contar todo esto es Verónica Schulman, la autora de la novela, que ha tenido la gentileza de enviarnos una pequeña reseña del proceso que la llevó a escribir «Sábados de súper acción».

Verónica nos cuenta: El nacimiento

Sábados de súper acción nació cuando en mi grupo de amigas y en mi surgió la necesidad de “enseriarse” con alguien, de tener un vínculo sobre el cuál se pudiese proyectar. Fue en ese momento cuando empezamos a vivir con más intensidad los fracasos en las citas y, aunque tampoco puedo decir que antes eran súper exitosas, durante adolescencia todavía no estaba ese deseo tan firme de tener una pareja estable , en cambio, al terminar la secundaria, la cosa se empezó a evidenciar y de ahí que en mi libro una de los primeros pensamientos de la protagonista haya sido “mis Barbies se casaban a los veinte” porque los veinte llegan y los veintiuno también y la situación sigue siendo más o menos igual: saliendo con amigas, esperando encontrar al amor bueno y definitivo y…a muchas se nos complicó darnos cuenta que a los veinte una no sólo no se ha casado sino que sigue viviendo en la casa de mamá y papá y que pueden pasar varios años para que el cambio suceda.

En esos años de espera activa, mis amigas y yo fuimos conociendo diferentes personajes y transitando distintas citas con finales más o menos patéticos.

La idea, entonces, fue capitalizar todo ese aprendizaje de “la cita fallida” y mientras trabajaba como asistente odontológica y me encontraba, durante las noches frías con “La estufita de Temperley” fueron surgiendo, por escrito, estas anécdotas patéticas literaturizadas.

De golpe tenía un material creciente que me desbordaba y hasta amigos de amigas empezaron a encargarme que les escribiese su anécdota, el público masculino también necesitaba reírse de sus fracasos en el amor y ahí los Sábados empezaron a crecer no sólo porque empecé a narrar sobre el mundo masculino si no porque entendí que todos (hombres y mujeres) caemos en ciertas patéticas circunstancias y que ahí el asunto del desencuentro amoroso se vuelve un poco más democrático.

Pero el tema es que todos esos pequeños recortes de la vida de amigos y de mi misma necesitaban cobrar una unidad y ahí Moro, unificó a todas las desventuras femeninas y Nahuel, su amigo las masculinas.

Fue un proceso larguísimo, la verdad es que había material para cinco novelas, tenía ganas de decir de todo, de hablar del amor, de la mujer, de la moda, de las dietas en las que nos metemos para, en definitiva, encontrar el amor, de los hombres, de la amistad, y una vez que eso estuvo adentro hubo que dejar un tercio afuera…fue un proceso larguísimo.

Pero hoy está terminada y se ha convertido en una novela en la que cualquier mujer que busca enamorarse podrá sentirse identificada, todas las personas que han sufrido por amor se encontrarán con estos personajes y todos aquellos que logran reírse de sus desencuentros se sentirán listos para seguir creyendo ¿en qué? En el amor, por supuesto.

Verónica Schulman.

Os animo a comprarla y a pasar un buen rato con esta estupenda novela. La editorial es Plaza & Janés, y lo podéis encontrar en musimundo.com.