Con motivo de la celebración del Día Europeo de la Prevención del Cáncer de Piel, Clínica Santa Elena quiere ofrecer unos consejos para protegernos mejor del sol, especialmente ahora que empieza la temporada estival.
La exposición a los rayos ultravioleta (UV) o rayos del sol, es el factor principal de riesgo en los tumores cutáneos. Nuestro estilo de vida actual, el aumento de horas al aire libre y también nuestra afición por lucir bronceado, hacen que nos expongamos al sol más de lo que sería recomendable. Además, el daño que provoca la radiación ultravioleta se va acumulando a lo largo de la vida, de ahí la famosa expresión de que “la piel tiene memoria”.
Los episodios de cáncer de piel han ido aumentando en las últimas décadas, sobre todo en los jóvenes y en las mujeres. Es probable que, dado que este tipo de cáncer no se percibe hasta pasado unos veinte años de la exposición excesiva a la luz solar, ahora estén saliendo a la luz esos casos provenientes de esa época en la que estaba de moda ponerse al sol durante horas sin apenas protección.
Según nos explica la Dra. Marta Prieto de Clínica Santa Elena de Madrid: “El cáncer de cutáneo se divide en dos tipos: melanoma y no melanoma (el más común). El no melanoma, se da más en personas adultas, por el sol acumulado durante toda la vida, probablemente con trabajos que requieren exposición al sol. El melanoma, el más agresivo, se produce por quemaduras en la infancia, aunque pueden salir en todas las edades”
como habéis podido ver, la propia doctora nos ofrece en este vídeo unos consejos para cuidar nuestra piel frente a los daños solares:
- Evitar lo máximo posible la exposición solar.
- Utilizar medios físicos de protección como sombreros o sombrillas y gafas de sol.
- Aplicar protector solar de la máxima protección posible.
- Acudir al dermatólogo en caso de notar alguna lesión en la piel, sea pigmentada o no.
Por su parte, la Fundación Piel Sana de la AEDV (Asociación Española de Dermatología y Venerología) ha presentado la campaña Euromelanoma 2021 con el lema “Misión Amarte”, destinada a difundir este mensaje de autoprotección y cuidado, y animando a que todo el mundo pueda autoexplorarse su piel de manera mensual y reconocer cualquier actividad extraña”
Yo por mi parte os dejo con algunas recomendaciones de los productos que yo utilizo, para que la exposición al sol sea segura y la piel no sufra daños.
- ANTES DE TOMAR EL SOL: Arkosol Intensivo, un complejo de caroteniodes 100% de origen vegetal, con plantas, vitaminas y minerales, formado por 9 activos de origen vegetal, además de selenio y cobre, que cumple la regla de las 3P para un bronceado saludable: Prepara de la piel antes del sungazing; Protege las células frente al daño oxidativo; Pigmenta la piel con un tono dorado tropical. PVP: 27,90€
- MIENTRAS TOMAS EL SOL: Spray Continuo P20 con protección 50, está compuesto por filtros orgánicos que actúan por absorción de la radiación solar ultravioleta y es muy resistente al agua. Además, gracias a la tecnología de spray multi-ángulo, permite una cobertura continua y uniforme y hace que sea rápido y fácil de aplicar. PVP: 19.50€
- DESPUÉS DE TOMAR EL SOL: Bálsamo Aftersun de Collistar, una emulsión rica, nutritiva y restauradora que aporta confort a la piel y garantiza una suavidad extra. Además, ayuda a fijar y a prolongar el bronceado. Su secreto reside en una fórmula basada en aceites vegetales, vitaminas, aleo, glicerol y fitoextractos con una acción intensa nutritiva e hidratante. PVP: 35€
