De la desnudez al look más siniestro y gótico. De la fresa madura al blackberry para los labios, sombras que se transforman en coloretes insolentes… Descubre la paleta de colores que este otoño llenarán las bolsitas de aseo. ¿Te atreves con el look que más se lleva?

De GRAFITTI, IMPACTANTE, GÓTICO, SINIESTRO, COLOR TOTAL, DESNUDEZ ABSOLUTA… y una infinidad de adjetivos se agolparán sobre tu cabeza cuando veas el maquillaje qué se lleva y cómo lo aplican los maestros en el arte de interpretar los rostros.

Las tendencias de este otoño invierno no te dejarán indiferente; o te enamoran o te espantan. El truco está, como en todo, en saber elegir lo que favorece y lo que no. En probar y probar los nuevos colores hasta dar con la combinación que mejor nos encaja a cada una. ¡No te cortes! Atrévete a innovar con tu maquillaje. ¿Quieres decubrir todas las claves?

Las miradas

Entrevista con el vampiro

Así se puede resumir la tendencia para ilustrar las miradas. El eye liner no se baja de su trono pero puede verse desbancado por las sombras negras intensas que dan ese aire gótico a la mirada. Aire que se suaviza cuando del negro intenso se pasa al gris ahumado.

Las sonrisas

Paseando por el bosque

Si alguna vez has paseado entre zarzas, recogiendo moras y bayas salvajes no te sorprenderá entonces la nueva paleta de colores. Del rojo mora golosina al negro azulado blackberry más jugoso de todos.

Una vez más, el negro es el color rey. También invade las barras de labios y los gloss, YSL y Lancôme ya tienen el suyo… Se entremezcla con el grosella, el morado, el cereza creando un efecto único. Lo hemos visto en las pasarelas de los más atrevidos: Lacroix, Dolce& Gabbana, Marni, Chloé y, por supuesto, Yves Saint Laurent… ¿Te podrás resistir?

Los rostros

Sombras tranformadas en blush

Esta es la tendencia más impactante. Las sombras más coloridas salen de los párpados para invadir las mejillas en su zona más alta, la más cercana a la sien. De este modo los lilas, los amarillos, los melocotones… tienen una doble función.

Claro que la cara aparentemente lavada y el rosa siguen siendo apuestas seguras y muy llevaderas, siempre y cuando, la perfección y la luminosidad de la piel sea el objetivo a conseguir.