No se ha realizado ningún estudio que permita comprobar que unos zapatos inadecuados provoquen dolor de espalda. Pero si has usado tacones demasiado altos durante mucho tiempo, seguramente te ha dolido la espalda en algún momento.

Y no sólo los tacones altos pueden causar dolor de espalda. También algunos zapatos chatos, incluso algunas zapatillas, te pueden provocar dolor, que por lo general se localiza en la parte inferior de la espalda, en la zona lumbar.

Las plantas de los pies tienen puntos que afectan a cada parte de tu cuerpo, por lo tanto, si pasas 10 horas usando zapatos que te provocan una mala e incómoda postura, puedes apostar a que algún lugar de tu cuerpo se verá afectado, especialmente la espalda.

Los tacones altos

Cuando estás en pie, a tu cuerpo no le cuesta mantener esta postura, ya que es una posición natural. Incluso puedes notar que tu cuerpo oscila de atrás hacia delante levemente si estas parada durante un tiempo prolongado; esto es normal. Se debe a que los músculos de la pantorrilla y la espinilla (o canilla) trabajan en conjunto para que no te caigas.

Pero cuando llevas tacones, los talones se elevan mientras que los dedos se mantienen en un nivel inferior. Para compensar este desequilibrio, muchos otros músculos de tu cuerpo, que por lo general no están acostumbrados a realizar este tipo de función, deben trabajar para mantenerte erguida. Esto te puede causar dolor en varias partes del cuerpo, por ejemplo en la pantorrilla, la espinilla, los dedos de los pies y la espalda.

Si estás usando tacones muy altos y sientes algún dolor en tu cuerpo, deja de usar esos tacones y cámbialos por unos más bajos, ya que si los sigues usando, puedes causarle una lesión a alguna parte de tu cuerpo.

Zapatos apretados

Cuantas veces has visto unos zapatos que te han encantado, has entrado a la tienda y no te valen O te quedan grandes o te quedan pequeños. Nos ha pasado a todas.

El consejo es: no compres zapatos apretados.

No solo te dolerán y se te lastimarán los pies, sino que pasará exactamente lo mismo que con los tacones altos.

Cuando tu pie se apoya en el suelo, debe estar en perfectas condiciones para hacer su trabajo de manera normal. Si están apretados, otros músculos de tu cuerpo deberán hacer el esfuerzo para mantenerte en pie, y seguramente la espalda sea la zona más perjudicada.

Zapatillas para hacer deportes

Hoy en día tenemos muchos estilos y diseños de zapatillas, no sólo para que elijas la que estéticamente te guste más, sino que el formato de la misma sea adecuado para tu pie.

Mira tus zapatillas viejas. Fíjate en qué área específica se han gastado más. Esto te puede dar un indicio de qué parte del pie es el que se apoya primero en el suelo. Con esta pista, cuando vayas a comprarte unas zapatillas nuevas, coméntale al vendedor que tú sueles apoyar tal parte del pie primero, y él te sabrá aconsejar cual tipo de suela y diseño es el que te conviene.

Ten en cuenta que cuando haces ejercicio tus pies se agrandan, por lo tanto, debe ser una zapatilla holgada, en la que sientas que puedes mover los dedos. Y la suela debe poder doblarse fácilmente. No elijas zapatillas con suela dura.