Soy una gran enamorada de los perfumes, pero he de confesar que también soy súper exigente a la hora de elegir uno para  ellos. Necesito que sean frescos y capaces de transmitirme sensaciones positivas. Y es que, para mí un perfume, es muchísimo más que la mera sensación de desprender un buen aroma; considero que es el reflejo de nuestra propia personalidad, de nuestros propósitos.

Pues bien, todo esto lo he encontrado en Prada Black Eau de Parfum, el nuevo perfume masculino de la firma. Una fragancia exquisita inspirada en la ciudad, en ese delicioso espacio entre el trabajo y el juego.

Prada Black Eau de Parfum, el perfume masculino más seductor

Prada Black es la primera Eau de Parfum de la familia Prada Luna Rossa. Tiene su origen en esa sensación tan maravillosa de explorar una ciudad desconocida, de descubrir  nuevos lugares e inspiraciones. La fragancia se inspira en ese momento de reflexión antes de adentrarnos en la jungla de asfalto; ese delicioso momento en el que somos nosotros mismos y en el que disfrutamos al máximo de la vida.

El aroma de este perfume es sencillamente encantador. Con un ligero toque dulce, el ámbar amaderado ofrece un efecto fascinante. Se funde de una manera exquisita con las notas de bergamota y angélica, presentando un corazón de pachuli y cumarina. El fondo del perfume es muy temperamental. Prada Black es un perfume que enamora, una verdadera experiencia para los cinco segundos. Desprende una personalidad magnética, perfecta para cualquier ocasión.

El frasco del perfume Prada Black Eau de Parfum, como no podía ser de otra manera, es exquisito. En esta ocasión la emblemática banda roja de Prada Luna Rossa se tiñe de negro sobre su frasco totalmente opaco. Sólo destacan el blanco nítido del logotipo y el nombre de la fragancia. Constelaciones sobre un cielo negro y brillante, como el reflejo de la noche en las aguas más profundas.