Cuando una vida empieza a gestarse existen muchas señales asociadas al embarazo. La más común es la falta menstrual o amenorrea, pero como no todas las mujeres tienen periodos regulares, es importante observar otras señales que vayan apareciendo, como: crecimiento y dolor de los pechos, náuseas, acidez, mayor salivación, fatiga, y micciones frecuentes. Aún teniendo todos los síntomas es importante confirmar el diagnóstico con un test de embarazo.

Esta prueba puede detectar la presencia de una hormona llamada gonadotropina coriónica humana, que es producida por la placenta y se encuentra presente en la sangre y en la orina de la mujer embarazada, esta hormona puede aparecer a los 15 días de la implantación dependiendo de cada mujer.

Aunque lleves unos días de retraso en la regla, tus síntomas son parecidos a los que experimentas habitualmente antes de la menstruación. Antes de conocer su estado, algunas mujeres notan cierto sabor metálico en la boca y una sensibilidad especial a los olores.

Aumento de tamaño mamario

Las mamas se congestionan, se sensibilizan y aumentan de tamaño debido a las hormonas del embarazo. Para muchas mujeres esto ocurre habitualmente antes y durante la menstruación, pero para otras es una señal de que algo distinto está ocurriendo.

Náuseas y Vómitos

Se presentan con más frecuencia en el primer trimestre del embarazo, debido al aumento de las hormonas, especialmente de la gonadotropina corionica humana, el estrógeno y la progesterona, que generalmente aparecen por la mañana y pueden continuar durante todo el día.

La mayoría de las mujeres están más cansadas de lo normal al principio del embarazo. Durante las primeras semanas de embarazo, su cuerpo empieza a producir más sangre para llevar nutrientes al feto. Su corazón multiplica sus esfuerzos, aumentando el flujo de sangre, su pulso aumentará como de 10 a 15 latidos por minuto.

Consejos:

Intente descansar lo que su cuerpo le pida. Trate de dormir 8 horas diarias y evite los trabajos pesados. En el segundo trimestre de embarazo el cansancio ira disminuyendo.

Frecuencia Urinaria

El incremento de los líquidos corporales, como la sangre y otros fluidos, que se hacen presentes durante el embarazo, hacen que el filtrado de los riñones sea mayor, y eso provoca que la frecuencia urinaria sea mayor. Su útero aumenta de tamaño, aún al comienzo del embarazo, a medida que el embarazo progresa, el tamaño del útero aumenta y la vejiga que está en contacto íntimo con él, se congestiona determinando la necesidad de orinar frecuentemente.

Dolores pelvianos

Se deben a la congestión y crecimiento del útero. La sensación es similar a las molestias premenstruales o a los dolores que se experimentan durante la misma.

Pequeño sangrado vaginal

Algunas mujeres tienen sangrado de color rosado o marrón, sin dolor abdominal (spotting), que puede corresponder a la implantación del huevo en el útero una semana después de haber sido fertilizado. Si el sangrado aparece con dolores, iguales o mayores que el de una regla, debe consultar a su médico.