Es importante controlar el peso durante el embarazo.

  • Tienen un riesgo dos veces mayor de dar a luz a bebés con espina bífida.
  • Aumenta también el número de cesáreas en el parto.
  • Las primerizas obesas tienen con más frecuencia bebés con bajo peso.

Los embarazos con sobrepeso, sobre todo en el primer trimestre de gestación, multiplican el riesgo de que el bebé nazca con problemas congénitos y de salud, según un estudio de la Universidad de Newcastle (Reino Unido).

Los autores del estudio constataron que en comparación con las mujeres con un peso equilibrado, las madres obesas tienen un riesgo dos veces mayor de dar a luz a bebés con espina bífida. El exceso de peso también se asoció a un mayor riesgo de recién nacidos con defectos cardiacos, hidrocefalia, malformaciones anales, reducción del tamaño de las extremidades y fisura del paladar.

No obstante, los autores del estudio pidieron no dramatizar las conclusiones, puesto que la tasa de nacimientos de niños con problemas de salud derivados de la obesidad de sus madres, pese a ser mayor que la de hijos de madres en su peso, no es alarmante. «El incremento, en términos absolutos, tiende a ser muy pequeño».

El sobrepeso también tiene consecuencias negativas en el desarrollo de la gestación, según otro estudio del Kings College de Londres, que llegó a la conclusión de que en mujeres obesas se dan más casos de eclampsia (aparición de convulsiones no atribuidas a otra causa a partir de la semana 20) y de partos prematuros. También los porcentajes de preeclampsia, una grave complicación del embarazo que, en casos extremos, puede derivar en la muerte de la madre y/o del fetos, son más altos (un 5% más) en las mujeres obesas que en el conjunto de la población.

Además, el número de cesáreas en el parto es mayor entre madres con sobrepeso y, como consecuencia, el tiempo de estancia en los hospitales, lo que contribuye a encarecer la factura sanitaria.

Pero la gran sorpresa para los autores de este estudio, que se centró en mujeres que estaban embarazadas por primera vez, fue que las madres con sobrepeso daban a luz con más frecuencia a bebés con bajo peso, es decir, por debajo de los 2,5 kilos al nacer.

«La gran proporción de bebés pequeños fue algo particularmente inesperado, teniendo en cuenta que la obesidad se relaciona con más frecuencia al nacimiento de bebés con sobrepeso», manifestó la directora de la investigación, Lucilla Poston.

«Debemos empezar a considerar los embarazos primerizos como un problema adicional en el caso de las mujeres obesas, que ya sabíamos que son más propensas que las mujeres más delgadas a tener un embarazo con complicaciones», manifestó Poston.

El bajo peso de los recién nacidos y los nacimientos prematuros presentan una relación con problemas como el daño cerebral, la dificultad respiratoria, los problemas de aprendizaje y una mayor susceptibilidad de los bebés a las infecciones.

Poston explicó que no se conoce la razón por la cual la obesidad causa estos problemas, pero apuntó la posibilidad de que ello tenga que ver con el llamado «síndrome metabólico» o «síndrome de la resistencia a la insulina», un problema que aqueja a aquellas personas que no procesan correctamente el azúcar que consumen.